En la Dirección de Fiscalización trabajó como juez y parte durante más de seis meses, ya que el coordinador de inspectores de la Zona Hotelera de la dependencia municipal, Federico López Ramos, fungía además como gerente de un conocido centro nocturno ubicado en el primer cuadro de la ciudad.

López Ramos, es señalado como el principal responsable de lo sucedido en la disco The City, ya que en vez de controlar al personal que laboraba el fin de semana en Punta Cancún, trabajaba directamente en el antro donde se empeña como gerente y donde también hubo un conato con un elemento de la policía judicial.

Por ser “juez y parte” Federico López Ramos cobraba la cantidad de 10 mil mensuales como funcionario del ayuntamiento Benito Juárez de forma oficial, ya que extraoficialmente también recibía “comisiones” de las extorsiones de los inspectores que trabajan en la Zona Hotelera.

De hecho, el día del zafarrancho en el The City, sólo pidió que los inspectores se reportaran con él vía celular. De ahí en fuera, abandonó sus responsabilidades para cumplir con su otro trabajo.

De acuerdo con fuentes oficiales de la Tesorería municipal, López Ramos ingresó a la Dirección de Fiscalización por medio del Sindicato de Trabajadores Sindicalizados del Ayuntamiento Benito Juárez, y aceptado por el exdirector de la dependencia Sergio Esquivel.

El trabajo de Federico López consistía en supervisar el movimiento, trabajo y sobre todo desempeño de los inspectores adscritos a la Zona Hotelera. Para ello recibió incluso en comodato un vehículo oficial del gobierno municipal, además de línea telefónica.

Su cargo era fundamental, ya que él representaba el enlace entre la dirección y los centros nocturnos, así como bares que operan en la zona de playas del principal destino turístico del país.

Como jefe de inspectores, López Ramos tenía que hacer rondines de vigilancia diurnos y nocturnos para verificar el trabajo de los elementos a su cargo, debido a que han existido muchas quejas de extorsión por parte de los discotequeros.

Sin embargo, lejos de realizar ese trabajo como jefe de inspectores, el aún funcionario público, se dedicaba principalmente a cuidar el centro nocturno donde labora como gerente general, el cual se ubica en plaza China Town y se especializa en música salsa y merengue.

Durante los últimos tres meses de trabajo, Federico López Ramos trabajó bajo el siguiente esquema: “Coordinar” mediante teléfono y mensaje a sus inspectores en Zona Hotelera, y trabajar de lleno en su centro de trabajo.

Las principales dudas en torno a su funcionamiento, radican en cómo llegó a la actual administración municipal. Existen dos teorías al respecto al interior de la Dirección de Fiscalización.

La primera de ellas es que llegó recomendado directamente del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento Benito Juárez; esta recomendación tenía tanto peso que de inmediato lo nombraron como jefe de inspectores.

La segunda indica que entabló una relación directa con el ex titular de Fiscalización, Sergio Esquivel, quien ahora se desempeña como director de la Zona Federal Marítimo Terrestre, Zofemat.

Cabe señalar que la nueva administración de la Dirección de Fiscalización, nombrada apenas la semana pasada, al detectar esta irregularidad decidió mover al que fuera jefe de inspectores en la Zona Hotelera, sin embargo, no se sabe si quedará removido de la dependencia municipal.