Secretario de Seguridad del DF dará banderazo al alcoholímetro el 23 de junio

El inicio del programa “Conduce sin Alcohol”, que tentativamente empezará a aplicarse el próximo sábado 23 de junio, tendrá como “padrino” al secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Manuel Mondragón y Kalb, precursor de dicho programa.

El director de Tránsito Municipal, Edgar Amílcar Alonso Paredes, garantizó que el programa se llevará a cabo de manera transparente, e invitó a la ciudadanía a participar como observador; agregó que “en estos días” se publicarán las modificaciones realizadas al Reglamento de Tránsito del Municipio en el Periódico Oficial del Estado y que permitirán la puesta en marcha del coloquialmente llamado alcoholímetro.

El funcionario detalló que participarán en el programa seis unidades debidamente identificadas (pintadas en color amarillo), y 32 elementos de Tránsito previamente capacitados, entre ellos, 11 mujeres. Además, indicó que en cada uno de los tres puestos de revisión que planean instalar en la ciudad contará con un médico.

Los puestos de revisión serán itinerantes y operarán tanto en el día como en la noche.

El Director de Tránsito descartó que la aplicación del alcoholímetro se anticonstitucional: “tenemos el fundamento legal ya en el Reglamento de Tránsito y ya están debidamente publicados los programas; se va a hacer público en medios de comunicación, para que la gente conozca que se va a implementar el programa y no se vean sorprendidos”, aseguró.

Para garantizar el respeto a los derechos de los usuarios, Alonso Paredes explicó que también contarán con la participación de personal de la Comisión de Derechos Humanos del estado, así como de representantes de organizaciones no gubernamentales, universidades, e instituciones privadas que quieran y tengan el interés de participar como observadores.

Recordó que quienes rebasen los límites de alcohol, deberán cumplir hasta con 36 horas de arresto, y recomendó a los ciudadanos evitar recurrir a los consabidos amparos: “un amparo, en promedio, el más barato es de 5 mil o 6 mil pesos. Entonces, el que quiera pagar esa cantidad por una libertad provisional, en lugar de cumplir con la sanción, que al final de cuentas tendrá que cumplir, será un dinero que probablemente van a tirar a la basura”, aseveró. (NoticaribeNews)