A pesar de que, como dicen los marinos, después de la tempestad viene la calma y el clima de este viernes en Cozumel fue esplendoroso, la decisión del nuevo capitán de puerto fue mantener la navegación restringida para embarcaciones menores que por una “zona de inestabilidad” que se encuentra a más de 850 kilómetros de distancia, lo que terminó de arruinar el día para los turistas que se la jugaron para quedarse a bucear en la isla y para los prestadores de servicios que pensaban empezar a recuperarse.

En el edificio de la Capitanía de Puerto, desde temprano y durante todo el día ondearon los banderines azul y amarillo que indican cierre de la navegación menor, a pesar del clima tranquilo y agradable que hizo este viernes.

Esto causó la furia de lancheros, operadores de buceo, pescadores y tripulaciones que no pudieron aprovechar el día ni atender a los turistas que, a pesar de todo lo ocurrido con “Rina”, para la mañana de este viernes estaban listos para bucear y se quedaron con las ganas.

No es la primera vez que, no habiendo mal tiempo alguno, el recientemente desempacado capitán de puerto, Eduardo Meixueiro Mancisidor, arruina las operaciones de la flota de lanchas y pequeños barcos dedicados al turismo y la pesca.

Los afectados atribuyen esto al hecho de que este hombre, ya bastante mayor, no conoce la isla de Cozumel y quizá nunca ha navegado en sus aguas.

Operadores de buceo y dueños de lanchas que pidieron el anonimato porque aseguran que, además, el capitán de Puerto y los elementos del resguardo marítimo federal, toman represalias contra ellos cuando los critican o denuncian alguna irregularidad, pidieron que por medio de este diario, se llame la atención de los superiores de quien consideraron que es “un marino de escritorio” pues temen que ante la inminente temporada de nortes, que coincide con la mejor época del turismo en la isla, el capitán aplique sus rigurosos criterios para declarar el puerto cerrado y dé al traste con la temporada.

Denuncian que por ejemplo, ante “Rina” cerró el puerto tres días antes de que se declarara la alerta naranja, “cuando cualquier marino de acá sabe que sólo requerimos unas horas para resguardar las lanchas” y que este viernes, ya pasada la emergencia y levantadas todas las alertas por el gobierno del estado, “por sus pistolas nos dejó cerrado el puerto que porque hay una zona de inestabilidad en la zona… pero en la zona de Centroamérica porque está casi hasta el Golfo de Honduras”.

Se refieren a una zona de baja presión que el Centro Nacional de Huracanes de Miami sitúa efectivamente en la zona marítima entre Honduras y Nicaragua y al que le da menos de un 10 por ciento de probabilidades de convertirse en un sistema tropical de importancia.

Por la presencia de ese sistema y porque supuestamente “dicen que Rina podría darse la vuelta y regresar” el capitán de Puerto impidió la navegación de las alrededor de 500 embarcaciones afectadas, aunque sí dejó que se reanudara la navegación de los barcos más grandes.

“Queremos hablar con él pero no nos escucha, nos trata como si fuéramos unos pende… y cree que sólo él sabe de navegación o que sabe más el boletín que le mandan de la capital que todos los que vivimos del mar en la isla y estamos en el agua todos los días” aseguraron los afectados.

Dado que no pudieron trabajar este día y ya se acerca un nuevo frente frío, hay el temor de que el puerto se mantenga cerrado buena parte de la próxima semana, lo que afecta gravemente su economía.