El representante de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN) en Cancún, Raúl Arjona Burgos, rechazó participar en la elección del nuevo dirigente estatal porque se trata de un circo y un proceso antidemocrático, aseguró, ya que la designación del próximo líder del PRD se realizará a través del Consejo Ejecutivo Estatal.

Consideró que la elección del nuevo dirigente no será democrática, pues no habrá siquiera una elección interna por votación libre y directa, como se ha realizado, sino que un grupo, o las corrientes que acuerden, designarán a la persona que dirigirá el partido del Sol Azteca en los próximos años, y todo apunta a que se avalará a Julio Cesar Lara, delfín de Julián Ricalde Magaña.

Recordó que en sus inicios el PRD fue un ejemplo de democracia porque las elecciones eran abiertas y participativas, tomaba en cuenta a los ciudadanos, pero “lamentablemente el PRD en la entidad, está regresando a aquellas épocas turbias en la que solamente una élite eran los que nos iban a dirigir, por eso, aunque se amplíe el plazo, yo no voy a participar”, sentenció.

Arjona Burgos destacó que son dos grupos al interior del PRD, los que “negocian” el control del partido: Nueva Izquierda (NI) y Alternativa Democrática Nacional (ADN), y los que ya acordaron quién será el próximo dirigente del Sol Azteca.

Consideró que su partido está perdiendo el rumbo y “al final la militancia y la ciudadanía les pasará la factura, al grado incluso de apartarse del partido e integrarse a otro, como sucede con Morena”.

Agregó que lo que más afectó al Sol Azteca en Quintana Roo, fueron los interinatos en la dirigencia, que por más de 10 años se alargaron a favor de un solo clan, en referencia a los Ramos, quienes en este periodo lo volvieron a prolongar, dejando un año más en el poder a Rafael Quintanar. (NoticaribeNews)