Bayern Munich se dio un festín 'bávaro' ante el Barcelona

Apenas en la Ida, la primera Semifinal de Champions quedó casi resuelta por la goleada de 4-0 que los bávaros le propinaron al equipo catalán.

Nunca tan inferior a alguien, el equipo blaugrana fue vapuleado, con muchos argumentos para suponer la desgracia: Messi no lució en su mejor forma, la defensa (sin los lesionados Puyol y Mascherano y en cambio Piqué con Bartra como titulares) fue ridículamente superada en cada balón por arriba, además de que en el frente Alexis ni Pedro pudieron colaborar con el debilitado argentino.

Ante las flaquezas del Barcelona, el Bayern fue puro poder, una máquina de eficiencia táctica y de contundencia implacable, donde no sólo lucieron Thomas Muller, Arjen Robben, Frank Ribery y Mario Gómez, sino también defensas como Dante, Philip Lahm y Alaba, estos últimos no sólo por contener al visitante sino por todo lo que contribuyeron arriba.

Tal superioridad incluso permitirá al árbitro, el húngaro Viktor Kassai, de pésima actuación, quitarse cualquier estigma de villano porque los dos penales que no marcó a favor del local por manos en el área se compensaron con un fuera de lugar y una falta en el segundo y tercer gol del Bayern que no pitó.

Mientras el Barcelona fue un equipo que extrañó la mejor forma de sus individualidades, el cuadro bávaro fue un conjunto en toda la extensión de la palabra.

Sin volcarse al frente, el cuadro de Jupp Heynckes aguantó apenas lo necesario para demostrar que en el contragolpe sería un vértigo letal.

Apenas al minuto 3, Víctor Valdés salvó con la punta del pie un disparo raso de Robben. Tras ello inició el desconcierto del silbante, quien al 15’ no pitó una mano clara de Piqué a tiro de Lahm.

De cualquier modo, tardó poco en caer el primero, ya que al minuto 24 apareció Muller para tenderse de palomita y rematar luego de un recentro de cabeza de Dante, quien ganó en el salto sin problemas.

Entre lo poco que tuvo el Barsa fue un centro de Pedro que casi remata Messi a la media hora de juego, además de un remate al cielo de Bartra cuando quedó solo frente al portero Manuel Neuer ya cerca del final.

Más allá de eso, todo fue fiesta bávara, sobre todo en el segundo tiempo, en cuyo inicio, al 49’, cayó el 2-0 con un remate de Gómez en fuera de lugar luego de un centro de cabeza de Muller.

Sin embargo, antes de ello, Alexis ya había cometido otra mano en el área catalana que a Kassai le pasó inadvertida.

Después de una gran jugada de Robben que casi termina en gol de Ribery, el holandés celebró el 3-0 al 72’ al entrar libre por la derecha frente a Valdés, aunque luego de que Muller le hizo un bloqueo estilo básquetbol a Jordi Alba para impedir que le marcara.

Borrado casi por completo el Barcelona, prácticamente sin capacidad de reacción ni fuerza para que el partido se jugara en terreno rival, la afición local festejó de manera anticipada el pase a la Final.

Aunque Valdés todavía salvó un nuevo gol al taparle un tiro a quemarropa a Robben al 79’, un par de minutos después Muller firmó el cuarto al empujar en el área chica un centro de Alaba.

Quienes esperaban el declive del Barcelona, en este partido tendrán el mejor argumento para vaticinar el fin de una era y, quizás sin esperarlo, el inicio de otra por el estilo desbordante de futbol del Bayern Munich.