Las Estrellas de América, encabezadas por la "Pulga", entretuvieron a la afición de Cancún con un triunfo de 5-3 sobre las Estrellas de México en la Copa Mundo Maya 2012.
A pesar de la constelación de figuras que estuvieron en la cancha, del calibre de Robinho, Marco Materazzi, el brasileño Diego o el uruguayo Diego Lugano, todo giró en torno al astro del Barcelona.
Desde su salida del vestidor caminó en medio de un tumulto de cámaras en el trayecto hacia la cancha. Tanto fue el fanatismo provocado por el argentino que al medio tiempo y después de su último gol varias personas intentaron burlar la seguridad y brincaron al terreno de juego para solicitarle una firma.
Un par de ellos llegaron hasta él y Messi accedió gustoso a rubricar las camisetas.
Sin embargo, fueron sus compañeros quienes iniciaron el espectáculo, sobre todo por las gambetas que intentaba Robinho.
Al minuto 13, el colombiano Jhon Viáfara adelantó a las Estrellas de América con un disparo cruzado sin demasiadas complicaciones que, para preocupación atlantista, no pudo contener el portero Jorge Villalpando.
Pero Damián Álvarez empató poco después con un golazo al ángulo, luego de una pared con Darwin Quintero.
Los goles fueron aumentando de calidad y prueba de ello fue el 2-1 de Diego a favor de los “Foráneos", ya que tras dejar atrás a Juan Carlos Leaño, capitán de los locales, le quebró la espalda a Hugo Ayala y puso su disparo colocado a la base de uno de los postes.
Pero faltaba el tanto de Messi y vaya que asumió la deuda porque el argentino se despachó con un doblete.
Luego de intentar un par de “sombreritos” sobre Villalpando con poco éxito, el argentino definió al final del primer tiempo luego de un pase de Lavezzi, aunque estaba en un fuera de lugar que no marcó el árbitro asistente.
Darwin acortó distancias para las Estrellas de México con el 3-2, igualmente un gol de excelente manufactura pues mandó la pelota al ángulo desde fuera del área al 54'
Ya con jugadores como los hermanos Dos Santos y Ariel Ortega en la cancha, además de Óscar Pérez en el arco en lugar de Villalpando, Daniel Osvaldo marcó el 4-2 a favor de las Estrellas de América, a pesar de que el “Conejo” le había desviado un remate a Messi en la misma jugada.
Antes de salir de la cancha a diez minutos del final, Messi se despidió con su segundo tanto para el 5-2, para el cual se encarreró desde tres cuartos de cancha como si vistiera la camiseta del Barcelona y definir luego de torcer completamente a Diego Reyes y llevarse a Gerardo Venegas.
Como a manera de trámite, Daniel Montenegro provocó el 5-3 con un tiro que desvió la defensa rival y terminó en autogol.
Con el silbatazo final, decenas de personas saltaron a la cancha para ver de cerca a los futbolistas, entre los cuales Messi ya no estaba porque al salir de la cancha también abandonó el estadio, contento porque la gente pareció haber disfrutado el show.