Un conato de riña se vivió la mañana de este martes en las inmediaciones de la Región 102, entre representantes del sindicato Andrés Quintana Roo y “tricicleros” de la CTM, quienes intentaban ganar un espacio para trabajar en el estacionamiento de reconocido supermercado de la zona.

La pelea verbal continuó hasta entrada la tarde, pues los “tricicleros” exigieron a las autoridades de Sintra los requisitos para de una vez por todas ser regularizados, sin embargo, no obtuvieron una respuesta concreta.

Al final de la pelea, la cual duró poco más de cinco horas, los elementos de la Policía Municipal se llevaron a los representantes del gremio de “tricicleros” y cinco unidades, mientras que el gremio taxista permaneció impune.

El primero encuentro se registró alrededor de las 12:30 de la tarde de este martes, mientras tres “tricicleros” del grupo Bicicolectivo Maya (Bicicom) de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) trabajaban al exterior del Bodega Aurrera ubicado sobre la avenida Puerto Juárez, mejor conocida como Talleres, en la Región 102.

Sin previo aviso, un grupo conformado por al menos cuatro patrullas y dos motocicletas del sindicato de taxistas Andrés Quintana Roo, liderados por el coordinador del gremio, Julián Romero, arribaron al lugar para intimidar a los “tricicleros” y obligarlos a que se retiraran del lugar.

Ante las amenazas, los ciclistas afirmaron que tenían permiso tanto de su gremio, como del supermercado para trabajar en el lugar, por lo que si tenían algún problema tendrían que hablar con Damián Alcocer, delegado de la CTM.

Por tal motivo, el coordinador del gremio taxista le pidió a gran cantidad de sus compañeros para que acudieran al lugar para tapar la entrada del estacionamiento del supermercado con las unidades, llamado al que respondieron de inmediato.

Esta situación provocó que los “tricicleros” llegaran de inmediato al lugar con más agremiados de la CTM, lo que en cuestión de segundos se convirtió en un conato de riña, pues incluso los clientes del supermercado se resguardaban en el inmueble para evitar ser dañados si se iniciaba la trifulca.

Entre “dimes y diretes”, los representantes de ambos gremios comenzaron a perder los estribos, lo que provocó que al lugar acudieran representantes de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra), quienes tan sólo sirvieron como espectadores, mientras que ambos lados se juraban amenazas y se negaban a ceder.

Invitándolos al diálogo, las autoridades de Sintra intentaron llegar a un acuerdo, sin embargo, el gremio taxista se negó a ceder afirmando que los “tricicleros” no hacían más que robarles el pasaje, poniendo en riesgo a los ciudadanos.

Ante esta declaración, Damián Alcocer, delegado de la CTM, afirmó que eran “puras mentiras”, pues en todo momento el sindicato respondía por sus trabajadores, quienes simplemente intentaban ganarse el pan de forma legal y honrada.

La trifulca prevaleció hasta poco después de las seis de la tarde cuando taxistas del gremio Andrés Quintana Roo rodearon por completo el supermercado, obligando a los policías municipales a arrestar a los representantes del gremio “triciclero” y confiscando cinco de las pequeñas unidades, dejando que los “martillos” se retiraran sin mayor problema.

Mientras era detenido, Damián Alcocer afirmó que lo único que buscaban era acercamiento con las autoridades para ser regulados de una vez y poder trabajar honradamente, sin embargo, las autoridades dejaban en claro que el poder lo tenía el gremio taxista, pasando por alto a las autoridades de Sintra.