Solapan autoridades ilegal aumento en pasaje en la ruta Tulum-Playa del Carmen

A pesar del anuncio del delegado de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra) de Tulum, Omar Loeza Castillo, de que sancionarían a los operadores de apliquen el incremento no autorizado en el costo del pasaje en la Riviera Maya, los operadores de los tres sindicatos que cubren la ruta continúan haciéndolo impunemente, lo cual es sinónimo del grado de corrupción que impera en este servicio, en perjuicio de la clase trabajadora.

A dos semanas de que los líderes de las organizaciones que operan el transporte público de pasajeros Tulum-Playa del Carmen y viceversa, Donato Castro Martínez, del Sindicato de taxistas Tiburones del Caribe, Santos David Balam Chan, de la Unión de Transportistas del Cambio (Untrac) y Jacinto Aguilar Silvarán, del Sindicato Lázaro Cárdenas del Río, las autoridades de Sintra no han hecho nada por detener este abuso.

Operadores de las camionetas que cubren la ruta Tulum-Playa del Carmen, señalaron con burla que pueden hacer lo que quieren en cuanto al cobro del pasaje, ya que sus líderes le entregaron una fuerte cantidad de dinero a Omar Loeza Castillo, para hacerse de la “vista gorda” en cuanto al incremento de las tarifas.

Señalaron que los dirigentes de las tres organizaciones sindicales, encabezados por el representante del gobernador en Tulum, David Balam Chan, líder de la Untrac, sostuvieron una reunión con Loeza Castillo, a quien le indicaron que no hiciera nada ante el inminente incremento que habían planeado en el transporte entre Tulum y Playa del Carmen.

Con la aprobación del funcionario estatal, los operadores de las camionetas de las tres organizaciones de transportistas recibieron “luz verde” para que apliquen las tarifas con incrementos, lo cual afecta seriamente la economía de los ciudadanos de Tulum y Playa del Carmen que laboran en la Riviera Maya.

Finalmente, los operadores manifestaron que no temen a sanciones por parte de Omar Loeza Castillo, titular de la Sintra en Tulum, ya que con una sola llamada de su dirigente, “lo apaciguan”.